Dr.
Francisco Campabadal De Mendiola
Especialista
en Medicina Familiar y Geriatría
Director
Médico para GNC
En nuestros tiempos, el insomnio es la principal queja
relacionada con el sueño. Se estima que éste afecta a alrededor del 35% de la
población general y su prevalencia incrementa significativamente conforme avanza la edad.
Se define en términos generales como una “mala calidad de sueño”, aun cuando existen
condiciones adecuadas y favorables para
obtener el mismo. Sus tres características principales son:
1.
Dificultad para iniciar el sueño.
2.
Dificultad para mantener el sueño durante la
noche.
3.
Despertar de madrugada sin poder volver a
lograrlo.
Todo lo anterior provocando
una función diurna afectada y alterada.
Su impacto sobre la calidad de nuestras vidas puede
llegar a ser profundo, pues uno de sus principales problemas, sino el
principal, es la manera en que afecta el rendimiento personal a lo largo del
día siguiente. Se conoce que su presencia está relacionada con un menor
rendimiento laboral, el cual a su vez provoca un índice mayor de
incapacitaciones, visitas médicas y disminución en ascensos laborales. Además,
se ha propuesto que éste actúa como un factor de riesgo independiente para
desarrollar otros males como la hipertensión arterial, la enfermedad
cardiovascular y la obesidad, entre otros. Su presencia está claramente
asociada también con estados de ansiedad elevada, depresión, baja autoestima y
poca motivación.
¿Cómo se trata el insomnio una vez diagnosticado? Lo
primero que se recomienda es adoptar e implementar las llamadas “técnicas de
higiene del sueño”. Estas incluyen:
1. Mantener un horario fijo para acostarse y despertar.
2. Evitar leer y ver televisión en la cama.
3. No permanecer en la cama por más de 30 minutos si no se ha logrado el sueño.
4. Evitar bebidas cafeinadas después del almuerzo.
5. Evitar ingerir bebidas alcohólicas durante la noche.
6. Evitar el fumado durante la noche (idealmente no fumar del todo).
7. Evitar el ejercicio pesado durante horas de la noche.
8. Evitar hacer siestas durante el día.
9. Reducir la cantidad de ruido y luz dentro de la recámara.
1. Mantener un horario fijo para acostarse y despertar.
2. Evitar leer y ver televisión en la cama.
3. No permanecer en la cama por más de 30 minutos si no se ha logrado el sueño.
4. Evitar bebidas cafeinadas después del almuerzo.
5. Evitar ingerir bebidas alcohólicas durante la noche.
6. Evitar el fumado durante la noche (idealmente no fumar del todo).
7. Evitar el ejercicio pesado durante horas de la noche.
8. Evitar hacer siestas durante el día.
9. Reducir la cantidad de ruido y luz dentro de la recámara.
Existen además distintos medicamentos que pueden ser
utilizados en conjunto con las técnicas de higiene para tratar el insomnio.
Entre estos se encuentran diversos agentes farmacológicos de tipo sedante-hipnótico. Para los que no deseen consumir fármacos, una alternativa en forma de suplemento natural es la Melatonina. Por lo general, la estrategia que resulta más efectiva es combinar las técnicas de higiene del sueño con un medicamento hipnótico por tiempo limitado, de 2 a 6 semanas, para ayudar a reinstalar un ciclo diurno-nocturno saludable.
Entre estos se encuentran diversos agentes farmacológicos de tipo sedante-hipnótico. Para los que no deseen consumir fármacos, una alternativa en forma de suplemento natural es la Melatonina. Por lo general, la estrategia que resulta más efectiva es combinar las técnicas de higiene del sueño con un medicamento hipnótico por tiempo limitado, de 2 a 6 semanas, para ayudar a reinstalar un ciclo diurno-nocturno saludable.
Este es un anuncio para el público en general, estamos interesados en comprar riñones y trabajar con diferentes donantes de riñones para poder salvar a nuestros pacientes, si está interesado en vender un riñón, contáctenos, para que podamos confirmar si usted es un igualar para donar un riñón a nuestro paciente y grandes recompensas esperan a cada donante.
ResponderEliminarContáctenos en nuestro correo electrónico: jupitermedicalcentreinc@gmail.com